viernes, 22 de julio de 2011

Mi hostfamily

El lunes me llamó la familia a las 5.11 p.m., a pesar de que yo había indicado en mi aplicación que mi horario de trabajo terminaba a las 6.30. El identificador de llamadas marcó el número como 'oculto' y pensé que podría tratarse de la familia, pero deseché la idea. Contesté y escuché una voz que decía algo como: "kfjasdñkfajdkfa fsfjksdfasjkf Cultural Care sdfakjsdfkajfdafajñ." No tenía idea qué me decía el hombre pero sabía que era mi futuro hostdad. Me preguntó si tenía tiempo de hablar y le comenté que me encontraba trabajando y que no podía tomar la llamada en ese momento. Se disculpó y dijo que llamaría dos horas después.

Temí que no lo hiciera pero lo hizo.
A las 7.11 exactamente, volvió a llamar. Ya estaba yo en mi casa y me pude acomodar plácidamente sobre la cama para tomar la llamada. ¿El resultado? 37 minutos de amena conversación. (¡Tienen futuro vendiendo enciclopedias!).

Desde el inicio sentí ese clic del que todas las au pairs hablan cuando encuentran su perfect match. El señor tiene un gran sentido del humor con el que congenié casi de inmediato, además de que parece ser muy sencillo ya que en más de una ocasión le pedí que me repitiera ciertas preguntas que no entendí y sin ningún problema las volvió a plantear.

Confieso que en más de una ocasión, el señor broméo y yo no entendí pero me reía con él y él pareció feliz con eso; y a pesar de mi inglés a medias, me dijo que era 'great'. y que había sido muy fácil para él comunicarse conmigo. Así que, chicas, confiemos más en nuestras capacidades.

Con la información que me dio, quedé bastante complacida por lo siguiente:
  • La familia vive en un suburbio, lo que significa tranquilidad vial para mi inexperiencia, ya que no me imagino conduciendo en avenidas de ocho carriles o speedways a diario.
  • De los tres niños a mi cargo, dos de ellos van al kinder, así que mi trabajo diario sería con un bebé. (Y aunque cuidar bebés es muy delicado, es relativamente más relajante porque no necesitas entretenerlos).
  • Mi horario de trabajo sería únicamente de lunes a viernes. Toda la tarde libre. 
  • Viven en una ciudad al norte de EUA donde neva en invierno, lo suficientemente intenso como para conocer la nieve, pero no tanto como para no poder salir de tu casa.
  • A pesar del dato catastrófico generado por Wikipedia, el señor me aseguró que cerca hay todo lo que uno necesite: malls, escuelas, templos, parques, Starbucks, y carreteras que te conectan a Washington en sólo media hora.
  • La familia me facilitaría un carro para transportarme a la universidad.
  • Lo mejor de todo es que el señor se escucha verdaderamente ameno. Es amable, bromista y parece muy sencillo. Hizo comentarios que me dejaron saber que le preocupa cómo pueda sentirse su aupair.
Durante la llamada hablamos de mi experiencia, de las personalidades de los niños, de mi novio, de lo que yo creo correcto para corregir la conducta de un niño, de mis hobbies y de la información que de todo esto se desprendió.


Al día siguiente, el señor me escribió y me pidió que le hiciera todas las preguntas que necesitase. Le escribí algunas que ya había visto en el handbook, y las que he recolectado a través de distintos blogs leídos. También le pregunté otras como si los niños rezan (quería saber si iba a encontrarme con Tod y Rod Flanders), si tienen permitido comer dulces, si la familia celebra Navidad y cómo, qué opinan los abuelos de tener au pair (he leído que generalmente los abuelos no congenian mucho con la idea de tener a una mujer joven y extranjera a cargo de sus nietos), qué disfrutan más de su familia y les hice una pregunta para asegurarme de que congeniáramos en ideas: ¿qué opinan de los concursos de belleza para niñas donde éstas deben usar dientes postizos, ropa de princesas y maquillaje a kilos?
Me respondieron de inmediato y quedé más que complacida con las respuestas. Me enviaron fotos de los niños y me sentí enternecida. Les agradecí por el gesto y les dije que había sentido un fuerte clic con ellos y que me parecían charming people.  Dijeron que habían sentido lo mismo.

Al día siguiente me escribió un correo avisándome que su au pair actual me llamaría por la tarde, quien afortundamente es latinoamericana también, así que no habría problemas de comunicación. Ella me confirmó que son una excelente familia y que lamentaba no poder extender con ellos.  Me dijo que se trata de una familia verdaderamente acogedora, armónica y preocupada por el feliz funcionamiento de todos sus miembros (incluida la au pair o polizón en cuestión). Me comentó que los niños son obedientes y cariñosos, pero que no me preocupara si en presencia de los papás se dedicaban a ignorarme. ¡No importa! ¡Puedo vivir con eso! Yo quedé encantada y más que convencida.

Así que, el miércoles a las diez de la mañana me hablaron de Cultural Care para decirme que la familia me había escogido como su quinta au pair. A partir de ese día, nos hemos mandado correos cortitos y me he sentido verdaderamente complacida.

3 comentarios:

Miss Indi Pop dijo...

wuuuuuuuuuuuuuu, felicidadeees :D que emoción, un paso menos ¿cuál es tu fecha de salida?

Vainilla dijo...

Todo depende de cuándo logre mi cita en el CAS. 22 o 29 de agosto.

Los astros se han alineado en mi contra para no poder concertar la fucking cita. ¡Ja!

Leidy Tatiana dijo...

Felicidades... ! Que bueno que hayas encontrado una linda familia y ademas ellos ya tienen experiencia con Au Pair así que debe ser un poco mas fácil para ti :)